9.25.2017

Crónica de la Provincia de N. S. P. S. Francisco de Zacatecas

Muy noble y leal ciudad: Artes y Letras del Zacatecas virreinal, columna cultural en el periódico Imagen. 



Con el ascenso de Felipe V y el posicionamiento de la conciencia borbónica, el reino hispánico tuvo un proceso de revisión de sus territorios, valores, etc. A lo largo de la monarquía se empezaron a escribir viajes, crónicas, descripciones, cuentas, pareceres de territorios, que exploraron los sentidos entre cultura, historia, mitología y tradición. De hecho, se realizaron debates entre el sentir de la Historia, la Real Academia fue un pie para el cuestionamiento de tales procesos.
Bajo este sentir debe entenderse Crónica de la provincia de N. S. P. S. Francisco de Zacatecas…, escrita por fray José Arlegui, calificador del Santo Oficio y sinodal de los obispados de Valladolid y Durango. Es un libro que indaga en torno a los orígenes de Zacatecas y el posicionamiento de la provincia de San Francisco. Fue publicado en México, por la casa impresora de José Bernardo de Hogal en 1737.
El texto indica, en su “Prólogo, que se trata de una “corta crónica” de la provincia, luego de sus 190 años que estuvo fundada. De tal manera, toma en consideración el debate sobre el quehacer de la Historia “como lo pide un siglo tan crítico”:
Las vigilias y pensiones, con que he solicitado, ya de los Archivos, ya de instrumentos jurídicos, y simples, ya de oculares testigos, ya de antiguas constestes tradiciones de personas dignas de toda fe, y crédito, las más noticias, que refiero, sólo el mandato de los Superiores pudo precisarme a sufrirlas; porque, habiéndose pasado tantos años, y estando las noticias de las cosas, que refiero, tan diminutas en los Archivos, ha sido el trabajo duplicado en solicitarlas, estando tan dispersas, para referirlas con alguna claridad, y unión en esta pequeña Crónica; y más para que saliesen todas la noticias verdaderas, que es el alma de la historia.
La primera parte de la Crónica… es la custodia de la provincia y los orígenes de Zacatecas. Así, afirma lo siguiente:
[…] los que primero poblaron estas tierras de Zacatecas, y los contornos de la Provincia, después del diluvio, fueron los Gigantes, hombre de descomunales cuerpos, y grandeza, muchos de los cuales han parecido en estas tierras, y yo he visto una muela en el puesto llamado San Agustín, entre Durango, y San Juan del Río, que medida ante mi Secretario, tenía la mesa de ella más de una cuarta en cuadro, que proporcionándose esta medida a la que ahora ocupa una de nuestras muelas, le correspondía tres varas, y media […].
La idea de Arlegui es poner en origen el territorio y pobladores, para reivindicarla en la Historia de la Humanidad. Da conexiones con el centro y pobladores de México. Coincide con Rivera de Bernárdez, entre Zacatecos y Chichimecas, por describir a los pobladores “de ánimos belicosos, y feroces”.

9.18.2017

Escuela mística..., reimpresión de Castorena y Ursúa

Muy noble y leal ciudad: Artes y Letras del Zacatecas virreinal, columna cultural en el periódico Imagen. 



La presencia de mujeres escritoras en el siglo XVII en España es un tema de investigación relevante, por sus temas, formas y vías de tránsito de sus obras. La mayoría de ellas pertenecieron a una orden religiosa; varias estuvieron envueltas en polémicas.
María de Jesús de Ágreda –quien se cuenta se apareció incitando a indígenas al bautizo en el septentrión americano– fue una abadesa escritora (1602-1665). Estuvo en el convento de las Madres Concepcionistas de la ciudad de Ágreda. Sus obras se enmarcan dentro de la tradición mística y ascética, dentro de su claustro.
La obra más conocida es Escuela mística de María Santísima…, un documento de varios volúmenes que, a sobre manera, explica el acercamiento y contemplación con la Virgen y la Ciudad de Dios. El libro fue publicado por vez primera en 1670, prohibida por la Inquisición y posteriormente reimpresa en múltiples ocasiones.
Juan Ignacio de Castorena y Ursúa reeditó la obra de María de Jesús en 1731 en la casa editorial de José Bernardo de Hogal. Es de notar el rescate de obras femeninas por parte del zacatecano, ya que están también Fama y obras póstumas… de Sor Juana y el resguardo de los poemas de doña María de Figueroa, que refiere el conde Rivera de Bernárdez en Descripción breve…
Castorena y Ursúa explica el sentido y forma del libro de María de Jesús de Ágreda:
En esta Obra preciosísima toda espíritu, en estas Sentencias todas enseñanza, en este pequeño cuerpo, que todo es alma, se debe imprimir el título de Escuela, cuando cada uno de sus Capítulos separados son Doctrinas adorables, y en los purísimos labios de su pronunciación, difundida la gracia rebosa dulzuras en las que habla el amor, y oye el respeto.
En la dedicación-razones de la publicación, se dan algunos datos de la impresión. El zacatecano habla de un “Mecenas”, por el gusto de la obra, pues es un libro de más de seiscientas páginas. Con todo, explica un sentir alegórico:
Y aunque para darlo al público recibí el impulso sin repugnancia, al efectuarlo mi deseo hallaba resistencia en el sobresalto de mi indignidad, hasta que acogiéndome a vuestras Aras os constituyó mi amor el Mecenas en la reimpresión de esta obra tan divina, que es vuestra por muchas, aunque con especialidad, por tres razones. Por ser de MARÍA Santísima su mejor parte; de vuestra Compañía la muy útil, y de mi cortedad la más pequeña.
Escuela Mística de María Santísima... en la edición de Castorena y Ursúa se acompaña un compendio de documentos, un Diccionario de la vida espiritual y prevenciones por parte del zacatecano, en las que explica la importancia de la abadesa. En estos últimos se destaca el proceso de canonización de María de Jesús de Ágreda.

9.04.2017

Novena a Nuestra Señora del Refugio de Pecadores

Muy noble y leal ciudad: Artes y Letras del Zacatecas virreinal, columna cultural en el periódico Imagen. 



La primera imprenta en América fue gestionada por el arzobispo de México fray Juan de Zumárraga y el virrey Antonio de Mendoza. Llegó en 1539, bajo el sello de Juan Pablos, representante de Juan Cromberger, editor alemán que vivía en Sevilla. Los primeros títulos impresos fueron catecismos y doctrinas cristianas que buscaron imponer reglas de comportamientos a los feligreses.
Luego de varios devenires políticos, intelectuales e ideológicos, otros impresores llegaron a América. El primer libro con poemas del que se tiene registro es el Túmulo Imperial…, impreso por Antonio Ricardos en 1560. A partir de allí, se puede hablar de un movimiento editorial importante, en el que se produjeron sermones, relaciones, leyes, copias de cédulas reales, entre otros.
Con todo ello, en aras de la propaganda de la fe, se siguieron imprimiendo catecismos o textos que enseñaban comportamientos o modos de pensar a lo divino. El Colegio de Propaganda Fide de Guadalupe Zacatecas tuvo algunas manifestaciones relevantes en aras de difundir la reflexión y la oración.
La Biblioteca Nacional de España resguarda Novena en obsequio de Nuestra Señora del Refugio de Pecadores…, un impreso signado por “el más pequeño Religioso de este Colegio de Propaganda Fide de nuestra Señora de Guadalupe, de la Ciudad de Zacatecas”. Se trata de un documento de 32 páginas a media cuarta; de un autor que no coloca su nombre, únicamente un signo nominal de humildad.
Cabe decir que tal documento es una reimpresión, hecha en México, por la casa editorial de los Herederos de José de Jáuregui en la calle de San Bernardo, 1781. El documento se acompaña de un grabado de Nuestra Señora del Refugio de Pecadores, la novena y una bendición.
La novena es un tipo de oración que se realiza en nueve ocasiones. Pen la Edad Moderna se consignó por nueve días. La fórmula antedicha es común entre la realización de las oraciones. En este caso, la intención tiene un fin y, como acto de reflexión que es la oración, hay una reflexión en torno a la vida de Jesucristo, de María o de la devoción propuesta.
En el caso de Novena en obsequio de Nuestra Señora del Refugio de Pecadores…, su inicio debía ser el 25 de junio, para que se terminara en la víspera de la Santísima Señora el 4 de julio, aunque se podía realizar siempre que se necesitara. El texto fue aprobado por el arzobispado de México, pues termina:
Viva Jesús, Viva María Purísima, y su Madre Anna Santísima por toda la Eternidad. AMÉN.
El Ilustrísimo Señor Doctor Don Alonso Núñez de Haro y Peralta, Dignísimo Arzobispo de México, concede ochenta días de Indulgencia a todos los que dijeren esta Jaculatoria, como consta por su Decreto de 15 de Julio de 1773.